Memorias

Proyecto de diseño narrativo con la maestra diseñadora Cecilia León de la Barra, de tema libre, pero basado en una historia existente.

El tema de Tlatelolco y el 68 lo escogí por que una de las clases que más me han movido y planteado puntos de vista maravillosos fue una clase de cine en el CCH, cuando tenía 16 años, donde el maestro Bulmaro Osornio nos cautivó con el cine, apasionando al grupo entero con grandes películas de directores que dejaban una huella de humanidad y nuevas formas de pensar en todos. En una de sus actividades de fin de semestre nos dio la tarea de realizar un cortometraje documental en equipos y decidimos que lo haríamos sobre Tlatelolco, cosa que nos abrió puertas a conocer un lugar cargado de simbolismo histórico, lugar arquitectónico cargado de evidencias de varias de las épocas importantes del país: culturas prehispánicas y sus templos de sacrificio, colonialismo y religión católica, con la iglesia y convento de Santiago y el modernismo del conjunto habitacional Nonalco. Tlatelolco, lugar que presenció uno de los momentos mas obscuros y de opresión de la historia del México moderno, todo un concentrado de historia.

Una resignificación narrativa y simbólica que retrata la inconsciencia e injusticia que involucró la matanza del 2 de octubre, en donde se usó el monopolio del poder y la violencia, rodeando los edificios y caminos con soldados, policías y agentes a una manifestación de estudiantes y trabajadores: que exigían sus derechos de forma pacifica. Quejas a un gobierno controlador que reprimía con violencia la libertad de expresión y encarcelaba presos políticos al por mayor. Todo esto para aparentar un país ordenado. Díaz Ordaz se sentó sobre el pueblo a expensas de la mirada del otro, en un trono para políticos sadistas que descansan en el acto de aplastar, cómodamente, las vidas de estudiantes y trabajadores. Maquillando la realidad para esconder los horribles actos que cometieron, esperando con ansias las Olimpiadas.